El fogonero

Carta de Orlando Ambrad a Leonel Giraldo el 29 de marzo 2012

 

 

Caro Leonel :

El documento de Ramiro es muy interesante y educativo, especialmente para el regional de Antioquia que con la elección de Uribe pensaron que su gobierno cambiaría a Colombia sacándola del mamertismo y de la dominación extranjera. Yo no lo niego fui un Uribista del 5%, por su programa anti FARC y el apoyo a las autodefensas de terratenientes contra las FARC. Ya Mosquera en una reunión del regional de Antioquia al cual participe por invitación del camarada Felipe, propone una alianza electoral con las autodefensas para sacar los mamertos de los consejos del magdalena medio que ellos controlaban. Fue un alianza productiva porque permitió al MOIR hacer pies descalzos con amigos que te protegían. Yo pase mi luna de miel con Luz Estella mi primera esposa, en una de las fincas de un miembro de las auto defensas que era además miembro del MOIR año 1974. Esta política ayudó al partido a ingresar al campo contra la voluntad del PC y funcionó hasta 1983 cuando comprendieron los mamertos que estábamos pisándoles las mangueras. Fue triste perder tantos compañeros y la política de pies descalzos inició su declino.
Este mismo año en la conferencia que hicimos en el Tolima, hable con Pacho y le comenté que tenía mis deseos de continuar mis estudios de Oncología en Roma, pero que estaba dispuesto a regresar al país y ayudarlo cuando me necesitara. Ese mismo año 83 Mosquera viaja a China muy mal acompañado Héctor y Valverde. Llegó destruido a mi apartamento en Roma mental y físicamente, su opinión y análisis de la situación en China con el ritorno de Deng: el revisionismo era a las puertas de Pekin y la revolución entraría en letardo. Con Héctor tuvo una pelea que se fueron a los puños y el camarada comisario abandonó la nave y se fue para Paris. Nos quedamos Mosquera mi mujer y Valverde que se comportó tan bien, que Emanuela lo recuerda como el más caballero de todos los Moiristas. (Después que tu viniste a negociar con los talebanis cambió de idea, que no solo era el loco el único caballero en el MOIR). La verdad es que lo cuido en sus borracheras y él se mantuvo alejado del alcohol. Al regresar a Colombia, inicia un periodo de estudio y de reconstrucción del partido, con la política de unidad de todas las fuerzas del país contra el terrorismo y el mamertismo. Como pude analizar por su contenido, en artículos publicados en tribuna y el tiempo, se condenaba el terrorismo de las FARC y el M19 y planteaba una política de alianzas con sectores patrióticos de la burguesía para enfrentar el mamertismo y el terrorismo. Me vi con Pacho nuevamente en Cartagena en 1986 con su nueva mujer y la niña que hoy debe ser una bella señoreta. Hablamos de genética y cáncer y poco de política. Profundizamos y analizamos la dificultad que tuvimos con pies descalzos y lo difícil que se venía para el Partido atacado por los mamertos y sin aliados con sectores patrióticos. Pienso que la muerte de Eduardo Rolón y posteriormente de Ramírez y Aidé Osorio, aceleraron la necesidad urgente de las alianzas con el sector Turbayista del Liberalismo que estaba dividido con Galán, Samper y el candidato de Turbay Hernando Duran… En resumen La seguridad democrática de Turbay frenó por 4 años las pretensiones golpistas del M19 y las FARC. El gobierno de Belisario condenó la política represiva de la seguridad democrática, dialogó y aceptó una paz con beneficios a los insurgentes, que no aprovecharon la debilidad de la propuesta. Con su paloma de la paz, obliga el retiro del ejército de las zonas calientes, abriendo las puertas del gobierno a los mamertos y M19. Por gracias del destino, estos estúpidos prefirieron la alianza con Pablo Escobar y mataron la gallina de los huevos de oro, asaltando el palacio de Justicia y cometiendo un crimen que ningún país serio podía perdonarlo. Las brigadas rojas Italianas pagaron 20 años de galera y no pudieron entrar al parlamento y mucho menos al gobierno.
En 1987 recibí la invitación de Pacho de regresar al País y ponerme al frente de la campaña electoral de Hernando Duran. Los candidatos que teníamos que apoyar eran nada más y nada menos Juan José García y su Hermano en Sucre, uno más decente, Carlos Espinoza Facciolince mi compañero de colegio, propietario de la nómina del Departamento y sus empleados debían dar el 10% de su salario todos los meses para financiar la política Lincista. Un método menos oneroso para el departamento que el de Juan José, el cual se adjudicaba todas las obras públicas del municipio y del departamento. Estos Personajes no son mejores ni menos corruptos que los políticos de la U de hoy. La conclusión y esto lo debemos comprender: los dueños del Estado son los partidos tradicionales y los sectores que llamamos patrióticos no les interesa la situación económica social de los obreros y campesinos de Colombia. Si estos personajes por quien tuvimos que votar para salvar el País de los Mamertos y del terrorismo les preocupara la suerte de los proletarios de Colombia nos les llamaríamos personalidades democráticas sino CAMARADAS.
Una bellísima anécdota en la campaña de la Uno. El MOIR consiguió en Sucre un aliado terrateniente, quien pidió ser candidato a la Cámara y financiaba la campaña electoral para el MOIR, no la de los mamertos. Marcelo preocupado por la imagen del partido ante los mamertos, que afortunadamente eran minoría en Bolívar y las listas las imponíamos nosotros. ¿Como hacemos para que el PC acepte el candidato impresentable del MOIR?. La respuesta genial de Gustavo Duncan fue: de ahora en adelante tendremos que llamarlo y presentarlo como EL Camarada Nicanor Manotas. Lo más simpático además que a el viejo Nica le siguió gustando el personaje Camarada, y cuando nos vemos seguimos llamándonos camarada.


 
 
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