El fogonero

Constancia dejada por Carlos Guarín en la ADE

Voté en la asamblea general de delegados de la asociación Distrital de Educadores en contra de la concertación, porque siempre he considerado que es un aspecto negativo y erróneo, fruto de la concepción política e ideológica de quienes promueven la conciliación de clases. La concertación es un comportamiento practicado durante más de una década por las centrales obreras, por la Ade y por Fecode, contraria a los intereses de los trabajadores. La política aperturista desarrollada por los gobiernos sucesivos de Colombia han llevado a los maestros y al resto de los trabajadores a desmejorar sus condiciones de vida. Las direcciones del movimiento obrero no han dado una respuesta correcta. Por el contrario, han colaborado con los diferentes regímenes desde Barco hasta Uribe, concertando y acomodándose a todas las medidas de la apertura y sus consecuencias privatizadoras y neoliberales. Con la creación en 1989 del Fondo de Prestaciones del Magisterio, avalado por Fecode se dio vía libre a la privatización de la salud en Colombia. El presidente Gaviria y el entonces senador Alvaro Uribe, aprovecharon la orientación de Fecode de desafiliar los maestros de las cajas de previsión, para iniciar el proceso de liquidación de la salud pública. En 1991 la mayoría del Comité Ejecutivo de Fecode apoyó a Germán Toro y Abel Rodríguez, ex presidentes de esa federación, quienes propusieron e impulsaron en la Constituyente la privatización de la educación. Más tarde, la dirección de Fecode liderada por Jaime Dussán y José Fernando Ocampo del Moir, aprueba la ley 115 de 1994 que desarrolla la privatización de la educación, contenida en la Constitución. La CUT, presidida por Luis Eduardo Garzón, principal adalid de la concertación, las centrales obreras, sindicatos de importancia nacional como Fecode, Sittelecom, Sintraiss, y otras organizaciones apoyaron al gobierno de Ernesto Samper, quien desarrollara eficazmente la tarea aperturista en Colombia. Para completar este cuadro antiobrero y antinacional, las direcciones de Ade y Fecode, orientadas desde el Congreso, han apoyado el Plan de Desarrollo de Uribe y la ley 715 de 2001 que municipalizó la educación, disminuyó la financiación y desreguló la profesión docente. El candidato Garzón hizo su campaña presidencial proponiendo al país la conciliación con el imperialismo y la burguesía intermediaria. Pretendió presentar, como ya obsoleto, el marxismo, la única salida al verdadero cambio político y social para una nación.
Mi voto en esta asamblea de delegados es un acto más de mis convicciones revolucionarias, es un pronunciamiento más contra el reformismo burgués y contra la conciliación de clases. Por tanto, aquí no culminan las contradicciones ni el debate político con las fuerzas que hoy votan contra la concertación que llevan a cabo las direcciones de Ade y Fecode, pero que en otras oportunidades la han compartido y practicado.

Bogotá, 25 de julio de 2003.

Bogotá, octubre 12 de 2003